Domingo 23.10.11
EL NORTE DE CASTILLA



Llegó a Palencia casi por casualidad, a través de una paciente palentina a la que trataba en su consulta de Madrid. «Fue algo casi mágico, se corrió la voz y me vi con el coche camino de Palencia», explica Antonio García, un terapeuta especializado en la tradicional terapia del shiatsu japonés. Ahora, se desplaza regularmente hasta la capital palentina para aplicar sus tratamientos curativos.

 

 

-No es un masaje, pero como trabajas con las manos, la gente rápidamente lo asocia al masaje. Pero el shiatsu es una terapia manual que se aplica con los dedos y con las palmas de las manos, nada más, y de lo que se trata es de estimular todo el sistema de defensas del cuerpo y todo el poder curativo que tenemos cada uno de nostros. Orientas al cuerpo a recuperar el equilibrio que ha perdido.

 

 

-No amasamos. Tiene más que ver con la presión de la digitopuntura que con un masaje de aceite. De hecho, con nosotros, la persona está vestida, con ropa cómoda, y aplicamos la presión en determinados puntos del cuerpo, basándonos en la medicina tradicional china, aunque también en la técnica de quiropraxia.

 

 

-Cualquier persona. Normalmente se tratan personas aquejadas de estrés, que puede producir muchas patologías, como lumbalgias. Trabajas todo el sistema nervioso y no hace falta enfrentarnos directamente a la patología, porque el propio cuerpo es el que va a reequilibrar todo lo que se ha perdido.

 

 

-En España está considerado así, pero en Japón está homologado por el Ministerio de Sanidad, que lo considera efectivo para corregir irregularidades en el cuerpo humano y aliviar ciertas enfermedades, sin que tenga efectos secundarios.